Capitalism is good

Cada día me pregunto cuando llegará esa generación que levante la voz y diga: “que estamos aquí coño”, me gustaría que fuese la mía, aunque no tengo muchas esperanzas. Yo intentaré aportar mi granito de arena para intentar mejorar mi país.

Hace unos meses vi un documental sobre China se titulaba China: Las nuevas multinacionales, me sorprendió como la gente aún estando en condiciones que para un europeo serían denigrantes como trabajar 11 horas diarias – que pro otra parte ocurre tambien en España, y lo digo por haberlo vivido – por un sueldo equivalente de 100€ al mes y viviendo en un cubículo enanísimo; el caso es que esta situación pare ellos es mejor que la anterior, para ellos es una mejora de su bienestar. Vosotros me diréis que es un país con un régimen totalitario,  valeeee lo es, pero poco a poco se irán ampliando libertades y llegará un momento en que posiblemente los Chinos alcancen una verdadera democracia. Una de las frases que más me llama la atención es la siguiente: “Si queremos alcanzar el mismo nivel de vida que los franceses o los americanos debemos pagar un precio, la gente de nuestra generación tiene que trabajar duro para que las generaciones futuras tengan una vida más fácil y eso es algo que no cae del cielo”

Resulta curioso como en el vídeo nos muestran una actitud totalmente capitalista y sin embargo reniegan de ello, mantienen que son un estado comunista – obviamente falso, o no del todo verdadero – siguen manteniendo estructuras propias del comunismo (el estado es director de la economía) pero por otro lado no se asegura la salud, la educación ni el trabajo a sus gentes. Con un mercado laboral muy, muy flexible, sin indemnizaciones por despido ni derecho a sindicarse o a huelga

si la gente estuviese descontenta no creo que su respuesta fuese hacer líder mundial a su país, le daría igual. Los chinos sin embargo luchan cada día por hacer más grande a su país, si veis el documental pensareis que esa gente está explotada, trabajando por un sueldo ínfimo y miles de horas; la mayoría vienen del campo, donde trabajan 24 horas al día y donde no ganan ni la mitad.

En resumen, no juzguemos con ojos occidentales actuales lo que ocurre en China ahora pues no hace mucho tiempo, en España y otros países “avanzados” estabamos en la misma situación.